Mi Testamento

Quien te escucha... si no soy yo, quien te ve a los ojos aunque sea que los tenga entreabiertos, pero sabes que te veo... no entiendo porque lo dices tan calladito, porque lo repites tan despacio, si sabes que entre nubes de humo puedo escucharte, mi respiración la siento muy densa, cada bocanada de aire, es como si mi espacio interior se llenara completamente, y como si sintiera el oxigeno que circula por mi cerebro, ese ambiente seco que sale de ti, cuando te tengo, es como ver llover en sequía, como un día de sol en medio de la nada, es como sentarte en mis piernas y enseñarte que no existe algo porque llorar en ese escalofriante horizonte, y si lo existe solo es agua que jamás podrás beber...
Y así mientras pasan las horas y el grito de la noche anunciada por un grillo se hace presente, y solo veo aquel cielo color naranja que se retuerce, como si ardiera entre ese fuego que se oculta todas las tardes, me siento culpable cada tarde, porque te veo a los ojos, veo como esa dulzura nace de ti, veo aquella magia que mi ser no logra soportar, y sé que si no te tengo puedo morir entre ese espacio, mas sin embargo mi estúpida e inmadura sabiduría no me deja demostrarlo, prefiero morir mil veces antes de logra dejarte escapar, quisiera sentir en mi pecho ese dolor que no quiero sentir... Necesito necesitarte para recordar olvidarte, y que en mi mente quede plasmada esos ojos color miel que salen de ti... pero oí que te has estado sintiendo mal, puedo calmar el dolor y ponerte de pie nuevamente, relájate...
En el horizonte tú estás viniendo solo a través de las olas, tus labios se están moviendo, pero no puedo oír lo que dices... cuando era niño, tuve fiebre, mis manos se sentían como dos globos. Ahora tengo esa fiebre nuevamente pero no lo puedo explicar, y si lo hiciera tan solo no lo entenderías, yo no soy así, y tú que me conoces lo sabes muy bien, yo me he convertido en un cómodo insensible, y siento que está bien, porque sea lo que sea que yo haga, tú lo vas a tolerar, y me vas a ver con esos ojos de ternura que te caracterizan, enseñándome ese color blanco que sale cuando tus labios se separan...
Espero poder lograr decirte esto que del interior de mi torpe existencia ves nacer estas palabras para muchos sin sentido y sin fundamento... pero para ti mi testamento...!